Las rebajas llegan al retail textil y ponen al límite el sector de la logística

Con el inicio de los descuentos, las empresas logísticas dedicadas al sector textil ven aumentada, en muchas ocasiones, la carga de trabajo. Los clientes emplean estas rebajas para invertir en aquellas prendas que no obtienen a lo largo del año, por ejemplo, según una estadística sobre el comportamiento del consumidor, el 94,3% aprovecha este momento, casi siempre, para realizar las compras necesarias.

Para hacer frente al incremento de las labores que hay que ejecutar, también surge otro dato que representa siempre una buena noticia: el descenso del paro. Las rebajas generan 207.400 nuevos contratos en el entorno logístico, según Randstad, lo que refleja la necesidad de las compañías de retail de ampliar sus plantillas para distribuir y manejar las existencias requeridas en este periodo.

Por otro lado, en estos últimos años hemos podido ser testigos del factor que ha revolucionado todos los paradigmas y que, día a día, utilizamos en casi todas nuestras tareas: Internet. Con la tecnología, el comercio ha ido evolucionando y cambiando, desembocando en lo que todos conocemos como e-commerce.

El auge de este formato ha sido imparable, consiguiendo que, actualmente, el 76% de los individuos compren de manera cotidiana tanto en tiendas físicas como online. De este modo, se han potenciado los sectores dedicados al transporte y la logística debido a las necesidades que deben cubrirse en el transcurso de esta actividad.

Con ello, los perfiles demandados por la industria crecen exponencialmente en esta época, dejando una larga estela de contratos para las tareas que se deben desempeñar. Sin embargo, esta situación trae consigo retos que las empresas del retail deberán afrontar para ofrecer los mejores servicios y, así, seguir aumentando el resto del año.

El papel de la logística en el sector textil

Tradicionalmente, la agenda de la moda funcionaba en torno a dos mitades de año, conocidas como temporadas, en las que se establecían dos colecciones diferentes, la de otoño-invierno y la de primavera-verano. No obstante, esto ha cambiado y ahora nos vemos inmersos en multitud de series de ropa que exigen, por parte de la logística, el mantenimiento adecuado de la renovación, casi constante, de los productos.

Esto demanda que los tiempos se reduzcan, al contar con una duración del periodo de vida de los artículos mucho más corta de lo que una vez lo fue. Por todo ello, las empresas dedicadas a la industria textil requieren de operadores logísticos adaptados a estas novedades, que puedan asegurar que la actividad se efectúe de forma adecuada, rápida y óptima para mantener el ritmo pautado.

El papel del retail es imprescindible para que el mundo de la moda funcione correctamente, pero en las rebajas se presentan varios desafíos que deben tenerse en cuenta:

• Aumento de la carga de trabajo. Los pedidos aumentan en este tipo de temporadas, por ello es fundamental que la gestión se realice de manera eficiente para conseguir mantener el ritmo de producción. Así pues, la planificación de las existencias debe ser prioritaria para asumir esta demanda y que el cliente reciba los productos con el menor margen de error y con la mayor velocidad posible.
• El cambio en el clima y sus efectos. Cuando el verano llega, también lo hacen las temperaturas elevadas y el desempeño del trabajo se convierte en una tarea mucho más pesada para los empleados. La presión que esto supone debe tomarse en consideración, ya que puede afectar a la moral y el rendimiento del equipo humano.
• Incremento de las devoluciones. Son múltiples los clientes que compran en exceso para llegar a tiempo a las ofertas y luego devuelve gran cantidad de los productos seleccionados. En una industria donde esta realidad ya constituye una problemática de importancia, podría volverse una labor más compleja.

Un factor clave en la época de rebajas: la logística inversa

Dedicar un momento a hablar de este fenómeno detenidamente resulta crucial para entender los retos del sector retail en rebajas.  Además, con la llegada en masa del e-commerce, el gran interrogante de esta actividad sin duda son las devoluciones.

La consultora CBRE, explica que el 35% de la población que compra por internet devuelve algún producto adquirido. Cifra que se vuelve aún más significativa si la relacionamos con que el 30%-40% de los artículos obtenidos a través de este formato son retornados a su punto de origen, suponiendo entre un 2% y un 4% de la facturación anual de las compañías textiles.

Esto puede explicarse mediante el símil del “probador”. Cuando realizamos una compra en una tienda física, contamos con los espacios necesarios para decidir si el producto elegido es de nuestra conveniencia. Sin embargo, a la hora de obtenerlos de forma online, esa posibilidad no existe, trasladando esos lugares al propio hogar. Mientras que en la primera puede volverse a colgar la prenda en su sitio, en casa debemos recurrir a la logística inversa para lograr el mismo resultado.

Esta realidad aumenta en la temporada de rebajas, donde muchas personas adquieren multitud de prendas para probarlas en casa y, más tarde, devolver aquellas que no son de su agrado, multiplicando las tareas que normalmente se llevan a cabo. Contar con un operador logístico que asuma estos retos, con la calidad y eficacia necesaria para que la actividad llegue a la productividad adecuada, es imprescindible para aliviar la tensión de este periodo del año.

La compañía ACSEP ofrece todos los conocimientos necesarios a estas compañías para desarrollar de manera correcta las labores vinculadas a la industria textil. Con experiencia operativa e informática, asesoran y optimizan el rendimiento de la cadena de suministro de estas empresas, para que los desafíos de las rebajas no entorpezcan el éxito de tu negocio.